El doctor Saúl Garza, del Instituto Nacional de Perinatología, explica que los videojuegos tienen beneficios. Uno de ellos es el desarrollo de la coordinación entre ojos y manos, que puede resultar una ventaja si el niño decide dedicarse a una profesión que tenga que manipular un objeto, como sería desarrollarse como médico en cirugía laparoscópica, por ejemplo. Garza también dice que los niños entre 4 y 6 años de edad no deben superar las 5 horas semanalas en los videojuegos y recomienda que sean juegos simples con personajes conocidos y que vayan a favor de desarrollar una habilidad específica.